Entrevistador: ¿Crees que tu vida refleja las enseñanzas y consejos que
compartes?
Entrevistado: La verdad es que no
completamente. A menudo, me encuentro hablando mejor de lo que vivo en realidad
y practicando menos de lo que predico. Claro, me gustaría ser más coherente
entre lo que digo y lo que hago. Sin embargo, cuando la gente se acerca a mí y
me dice que mis palabras les han ayudado, siento que estoy cumpliendo con una
función esencial. Si lo que comparto sirve de ayuda a otros, aunque yo no lo
practique al cien por ciento, siento que estoy contribuyendo de alguna manera.
Como dice el dicho: "Si no sirve para nada, al menos sirve de mal
ejemplo". En mi caso, espero que quienes escuchan mis palabras y consejos
logren cumplir sus objetivos, incluso si yo mismo a veces me quedo corto.
Entrevistador: Es una respuesta honesta y
humilde. Muchas gracias por tu sinceridad.
Entrevistado: Agradezco la oportunidad de reflexionar sobre ello. Como
siempre, es un proceso continuo y todos estamos en un viaje de aprendizaje y
crecimiento.
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